Comunicado de la Federación de APAS

COMUNICADO
DE FEDERACIÓN DE AMPAS ANTE LA IMPLANTACIÓN
 
DE LAS
RELIGIONES NO CATÓLICAS DENTRO DEL SISTEMA EDUCATIVO RIOJANO


Desde la Federación de Asociaciones
de Padres y Madres de Alumnos de La Rioja venimos reclamando desde hace muchos
años la eliminación de la asignatura de Religión del sistema educativo riojano
y avanzar hacia un modelo educativo laico. Esto no significa que en la escuela
pública no se deba tratar el hecho religioso como un aspecto más de la
existencia humana en asignaturas como Historia, Arte o Filosofía. Pero la
religión, cualquiera de ellas, como explicación dogmática de la realidad, debe
estar fuera del currículum escolar en un país del siglo XXI.
Conscientes de que la ley española
fomenta, permite y brinda la posibilidad de que se imparta la asignatura de
Religión en cuatro confesiones: católica, islámica, evangelista y judía,
queremos expresar nuestro malestar en cuanto a la manera elegida para hacerlo
por parte de la Consejería de Educación dirigida por D. Alberto Galiana.
Estamos completamente en desacuerdo
con el nombramiento previo de centros designados para impartir la religión
islámica o evangélica y la imposibilidad de cursarse en otros, aunque sea
demandada por parte del alumnado. Esta medida atenta contra el derecho de libertad
de elección de educación religiosa que la propia ley refleja y defiende.
Opinamos que, sobre todo, tiene la intención de segregar y marcar a
determinados centros con el sambenito de ‘Centros
para Musulmanes’
o ‘Centros para
Evangelistas’
. En este sentido, apelamos a la postura defendida
conjuntamente por las AMPAS de los colegios públicos Caballero de la Rosa,
Madre de Dios y el IES Comercio y apoyamos las protestas del colegio
Quintiliano de Calahorra.
Exigimos a la
Consejería de Educación, y a su titular D. Alberto Galiana, que rectifique el procedimiento de
implantación de las religiones no católicas y que éste se realice de una manera
general. Es decir, que se imparta en los centros donde los alumnos lo soliciten
en régimen de igualdad, tal y como actualmente se imparte la asignatura de
Religión Católica.  No hacerlo así, es una medida discriminatoria que roza
la ilegalidad.

Por
otra parte, animamos a todas las familias de la escuela pública a que el
próximo curso no matriculen a sus
hijos e hijas en la asignatura de Religión (cualquiera de ellas: católica,
islámica o evangélica). Como ciudadanos debemos dar ejemplo y, si creemos en
una educación sin dogmas, podemos apartar las religiones de la educación
fácilmente, pese a los reiterados esfuerzos que las organizaciones religiosas o
la Consejería de Educación realizan para mantenerlas dentro de la escuela
pública.